A tal punto ha escalado la crisis de seguridad en el país que a los secuestros, robos, asesinatos y encerronas, se sumó un ataque con una granada a una carabinera.
Por ello, este jueves un grupo de diputados oficialistas pidió al Gobierno extremar las medidas y decretar un Estado de Excepción de carácter nacional. Y aunque el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, lo descartó, insistieron en que el problema «supera al propio Gobierno y las capacidades de la policía», ya que afirmaron que «estamos en medio de la crisis de seguridad más grave de la historia republicana de Chile».
En Mirada Líbero, Eric Aedo, jefe de bancada de la DC y uno de los diputados que solicitaron decretar la medida de excepción constitucional, afirmó que «el Estado no estaba preparado para esta envergadura de crimen organizado». «Estas son bandas con mucho poder de fuego, con un nivel de preparación importante, con redes de inteligencia que operan no sólo en las calles, sino también desde las cárceles, que son capaces también de corromper las propias instituciones públicas», explicó.
El manejo del Gobierno sobre la crisis de seguridad ha sido muy criticado. Hay sectores que incluso han pedido la salida de la ministra del Interior, Carolina Tohá (PPD), de su cargo. Ante esto, el diputado Aedo dijo: «Sé que Tohá está haciendo un esfuerzo enorme por convencer a todas las fuerzas de este Gobierno de izquierda de que la seguridad hay que tomársela en serio».
«Tohá es parte de un Gobierno en que una parte importante cree que los ‘patos malos’ son víctimas del sistema», apuntó. «Aquí se está desestabilizando nuestra forma de vida. Los sectores más de izquierda, Frente Amplio y Partido Comunista, tienen que asumir que la seguridad es un problema principal del país. Los llamo a no ser ingenuos», agregó.
De acuerdo con Aedo, «este Gobierno tiene que hacer el mea culpa de que ya no puede seguir en la lógica de ‘pobrecitos los criminales’, sino que simplemente tiene que aplicar la ley».
Aedo: «En la situación que estamos, un inmigrante irregular tiene que ser expulsado del país»
El diputado alertó que «quienes hoy delinquen son bandas organizadas, criminales, especializadas en sembrar miedo y a través del miedo tener control en los territorios, en la economía y hacer sus negocios».
«En Colombia lo hacía Pablo Escobar. Lanzamiento de granadas, secuestro, sicariato. Eso está pasando en Chile hoy día», señaló.
En la misma línea, aseguró que «tendríamos que ser muy ingenuos si no quisiéramos mirar que lo que pasaba en Colombia o Venezuela hace 10, 20 años atrás, hoy día son las formas habituales del delito en Chile». El diputado planteó que hubo una llegada de extranjeros que vinieron a Chile a «hacer el bien y trabajar», pero «otros simplemente vinieron en búsqueda de nuevos negocios ilegales».
Para enfrentar esa situación también propuso al Gobierno una «operación rastrillo». «Yo creo que a estas alturas, en la situación que estamos, inmigrante irregular o extranjero irregular tiene que ser expulsado del país, a no ser que estés en una situación humanitaria que sea muy compleja», aseveró.
Ese es uno de los artículos que contiene la propuesta constitucional que se votará en diciembre. Al respecto, el diputado dijo: «Yo no soy partidario de este texto constitucional que se nos va a presentar. Voy a votar ‘En contra’, pero sí soy partidario de que todos los inmigrantes ilegales tengan que ser expulsados del país. Eso lo puedes hacer a través de una ley que se está discutiendo en el Parlamento y espero que el Gobierno le dé discusión inmediata».