Ayer en la mañana la ministra Javiera Blanco llegó hasta la sede del ex Congreso en Santiago para asistir a la comisión especial de diputados que revisa la acusación constitucional en su contra por la grave situación en que se encuentra el Sename.

En la instancia, presentó su defensa acompañada de su abogado, el ex subsecretario y constitucionalista DC, Jorge Correa Sutil.

Pero más temprano, la titular de Justicia recibió un fuerte apoyo a través de una carta publicada en El Mercurio. ¿El firmante? El ex ministro de Educación del gobierno de Sebastián Piñera, Harald Beyer, quien en 2013 fue acusado constitucionalmente y destituido por la Concertación.

En el texto, el actual director del CEP sostiene que “la acusación constitucional es un instrumento que el Parlamento debe utilizar en casos extremos, siempre que las autoridades del Estado se hayan alejado de principios fundamentales que se espera satisfagan con plenitud. Más allá de la evaluación que se pueda hacer de la gestión de la ministra Javiera Blanco me asiste el convencimiento de que ella no ha incumplido ninguno de esos principios”.

“Someterla, entonces, a dicha acusación es alejar la política del campo en el que esta debe razonablemente desarrollarse. Nada justifica incurrir gratuitamente en ese costo. Menos en tiempos que la confianza en nuestras instituciones y nuestros líderes políticos nacionales se ha deteriorado significativamente”, agrega.

Al principio de la carta, Beyer dice que “en un régimen presidencial corresponde a la Jefa de Estado, la que también es Jefa de Gobierno, decidir si los ministros resisten adecuadamente ese escrutinio y realizan una gestión acorde con lo que se espera de ellos. Si su decisión es negativa probablemente recurrirá a su reemplazo. No es la tarea del Congreso reemplazar a los Presidentes en este papel”.

Cercanos a Beyer cuentan a “El Líbero” que el ex ministro no conoce a Blanco y que la carta, más que representar una defensa a la titular de Justicia, fue pensada para dejar sentado un principio.

Pero otros han ido más lejos y han interpretado el gesto como una “vuelta de mano”. No a Blanco, si no que a Correa Sutil.

Correa Sutil y los errores de la acusación

A principios de abril de 2013, ad portas de la votación en el Senado de la acusación constitucional contra Beyer, el abogado constitucionalista DC encontró un error en el contenido del libelo. Según informó El Mercurio, en el texto presentado en la Cámara se invocaban tres normas que sustentaban la petición de los diputados de la Concertación para destituir al entonces secretario de Estado, pero éstas estaban ligadas a las tareas que desarrollaba el Ministerio del Interior y no a las facultades que les correspondían a la cartera de Educación.

Según informó Correa en su momento, el texto tenía párrafos textuales de la acusación que se había realizado en 2012 contra el ex ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, la que finalmente no prosperó.

El “descubrimiento” de Correa Sutil fue leído por esos días como un apoyo explícito a Beyer ante la arremetida de la entonces oposición. Y no era el único que transitaba por ese camino. Otros líderes de la Concertación como Mariana Aylwin y José Joaquín Brunner manifestaron su rechazo público a la acusación constitucional.

 

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