Juan Carlos Gazmuri: No sirve una nueva Constitución si no tenemos nuevos municipios
Juan Carlos Gazmuri
Para nadie es sorpresa las graves lógicas clientelares y de tráfico de influencias que día a día se ven en nuestros municipios, al punto de transformarse en algo normalizado, como si fuese parte del paisaje en ese nivel de la administración pública.
La discusión constitucional está desplegada y muchos hablan de la necesidad de un nuevo Estado. Así, mientras algunos hablan de uno más moderno y eficiente, otros de uno más grande y robusto. Pero de nada sirve la discusión constitucional –teórica y conceptual- si olvidamos la discusión más concreta y territorial: la municipal.
Hoy tenemos un problema a nivel municipal del cual no se ha hablado lo suficiente. Porque, si bien la figuración farandulera de nuestros alcaldes en los medios de televisión les ha permitido ganar popularidad y conocimiento, esta ha eclipsado y ha ocultado debajo de la alfombra los gravísimos problemas de ineficiencia y falta de probidad que tenemos en nuestro sistema municipal.
Ya el año 2015 la Comisión Engel, dentro de sus propuestas contra la corrupción, dedicó todo un capítulo a la probidad en los municipios, advirtiendo que existe “un grave desequilibrio en cuanto a transparencia, rendición de cuentas y fiscalización frente al nivel central“. Los últimos escándalos de fraude en licitaciones de luminarias o de vínculos con el narcotráfico son sólo los casos más mediáticos y conocidos. Pero para nadie es sorpresa las graves lógicas clientelares y de tráfico de influencias que día a día se ven en nuestros municipios, al punto de transformarse en algo normalizado, como si fuese parte del paisaje en ese nivel de la administración pública.
La ineficiencia y despilfarro de recursos a nivel municipal también es un tema sobre el que poco se refieren los matinales cada vez que entrevistan a algún alcalde. Así, mientras nuestros alcaldes recorren los distintos canales de televisión pidiéndole más recursos al gobierno central, un estudio de la Universidad Diego Portales -luego de analizar 324 municipios entre los años 2008 y 2018- estimó que estos podrían proveer los mismo servicios que proveen hoy con un 53% a 61% menos de recursos. Es decir, ¡con menos de la mitad de los recursos que administran hoy!
Tienen razón nuestros candidatos a constituyentes cuando señalan que no tendremos una sociedad más justa sin un Estado más justo y eficiente. Pero la verdad es que no tendremos un Estado ni más justo ni más eficiente sin municipios más probos, justos y transparentes. Estos son la puerta de entrada, y la bajada territorial de las políticas públicas y servicios del Estado.
Si queremos un nuevo Estado, necesitamos tener nuevos Municipios.
Solo miembros de la Red Líbero pueden comentar.
Regístrate o inicia sesión pinchando aquí.