A las 0:00 horas de hoy expuso Hernán Herrera, presidente de la agrupación de colegios subvencionados de Chile (Conacep), en la comisión de Educación del Senado sobre la reforma educacional que busca eliminar el copago, el lucro y la selección en la enseñanza básica y media del país.
Lo que más le sorprendió fue enterarse de que el Gobierno le puso suma urgencia al proyecto de ley para que se vote en la Sala del Senado, en general, el 27 de noviembre próximo, como ratificó a este medio el presidente de la comisión, Fulvio Rossi, sin que hayan expuesto los 80 invitados. Ello, pese a que la Presidenta Michelle Bachellet el viernes pasado afirmó: “Vamos a dialogar todo lo que sea necesario para mejorar y hacer los ajustes que una reforma de esta importancia requiere”.
“Esto no se condice con el llamado de la Presidenta, de que vamos a escuchar a todos, cuando en 15 días más el proyecto debe salir de la comisión de Educación. Me parece que esto echa por tierra lo que habíamos pensado, que iba a ser un proceso reflexionado, porque le ponen de nuevo suma urgencia como en la Cámara de Diputados, y obliga a legislar a matacaballo”, señala Herrera.
El dirigente gremial dice que la suma urgencia impedirá que se realicen mejoras a la iniciativa. «Hemos escuchado en palacio que hay que sacarlo sí o sí en enero, salga como salga, y si tiene problemas se arregla en el camino», asegura. “Esa no es la solución. Arreglar esto en el camino es generar efectos que después no podrán reversarse”, reclama.
A su juicio, el proyecto de ley requiere cambios profundos en cada uno de sus objetivos de fin al lucro, el copago y la selección, por lo que hizo una presentación de 30 páginas con el detalle de cada problema y su propuesta de solución. (Ver Presentación de Conacep en el Senado)
“Se debería revisar todas las alternativas, buscar factibilidades, tratar de mejorar el proyecto, que no deje desprotegidos a los sostenedores, que les permita seguir siendo gestores, pero lo que vemos es que ahora todo se había planificado para recibir a organizaciones y expertos en dos semanas. No sabemos cuánto más se puede avanzar en las soluciones que el ministro Eyzaguirre ofrece”, cuestiona el dirigente.
Ley entraría a regir en cuatro meses más
El presidente de los colegios subvencionados, que educan al 54,2% de los 3,5 millones de alumnos de la enseñanza básica y media, advierte que de aprobarse la ley en enero, como espera el Gobierno, el nuevo sistema entrará en vigencia en marzo, lo que tendrá impacto inmediato en los sostenedores.
“Este proyecto va a implicar, de aprobarse así y no darle salida a los dueños de la propiedad y sostenedores, el cierre de una gran cantidad de colegios en dos años más cuando se implemente. Pero en 2016 los sostenedores tendrán que tomar decisiones respecto de qué van a hacer”, afirma.
Según encuestas realizadas por la Conacep con sus asociados, el 25% de los sostenedores señaló que se cambiarán a colegios particulares pagados, el 70% cerrará y sólo el 5% ha manifestado interés en permanecer en la educación particular subvencionada.
Herrera también cuestiona que el Ministerio de Educación no tenga sus cálculos de cuál será el impacto concreto de la reforma en el sistema educativo, y advierte que quizás esté dispuesto a que hayan establecimiento que cierren.
Críticas de ex ministros de Educación
Los primeros invitados a la comisión de Educación fueron los ex ministros de Educación de los gobiernos de los últimos 20 años –cuatro de la Concertación y tres de la Alianza-, José Pablo Arellano, Ernesto Schiefelbein, Mariana Aylwin, Sergio Bitar, Joaquín Lavín, Harald Beyer y Carolina Schmidt.
Las principales críticas apuntaron al corazón de la reforma y a un deficiente diagnóstico del sistema, que busca prohibir que los sostenedores obtengan justas retribuciones por prestar su servicio, terminar con la selección por razones académicas, no incluir el mejoramiento de los profesores, y por efectos no previstos del proyecto como el cierre de colegios, el rechazo de los padres, los sostenedores, de la Iglesia Católica y de otros actores del sistema.
“Mi pregunta final es si vale la pena tensionar así al sistema educativo por una reforma que ha sido improvisada, que no ha previsto sus efectos y que prescinde de la realidad. La reforma a la educación requiere un acuerdo que la haga posible y sustentable”, cuestionó la ex ministra Aylwin.
Fuga de colegios municipales
En los últimos 10 años, los colegios municipales han perdido más de 500 mil alumnos y hoy educan a poco más de 1.305.000 niños.
En contraste, los 2.862 colegios particulares subvencionados han logrado captar a 379 mil niños más en el mismo lapso. Hoy tienen una matrícula que supera los 1,9 millones, lo que representa el 54% de todos los escolares del país.
Las escuelas municipales tienen el 38% de la matricula escolar y los colegios particulares pagados representan el 8% de 3,5 millones de estudiantes de enseñanza básica y media.
FOTO: RODRIGO SÁENZ/AGENCIA UNO