Este 3 y 4 de diciembre se realizará la Teletón 2021 que prevé 27 horas de transmisión televisiva. Este año se realizará con estrictas medidas sanitarias por lo que será a través de un formato híbrido, con transmisión únicamente desde el Teatro Teletón y sin el cierre tradicional desde el Estadio Nacional.
Todos los años cuando la publicidad del evento se comienza a tomar los centros comerciales y se acerca la fecha empiezan a alzarse ciertas voces críticas desde sectores de la izquierda que preferirían que el evento no se lleve a cabo. Algunos porque aseguran que el Estado debería cumplir con la labor de ayudar a los niños y jóvenes con discapacidad, otros porque opinan que existe poca transparencia en los gastos de la institución, y otros que señalan que es un show televisivo con un rol importante del marketing empresarial.
Por ejemplo, en el entorno del abanderado presidencial de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, su jefa de campaña y expresidenta del Colegio Médico, Izkia Siches, aseguró a través de su cuenta de Twitter no participar de la iniciativa. «Comprender los desafíos de superar el concepto #teleton es tarea de todos. Se valora el aporte pero la salud merece más», escribió en un tuit en 2012.
@rafagaray lo entiendo… Pero debemos avanzar. Asegurar salud y rehabilitación de calidad… No existe teléton para todas las patologías.
— Izkia Siches Pastén ???????????????????? (@izkia) December 1, 2012
Pero no es la única figura del círculo de hierro del aspirante a La Moneda que ha salido a criticar el encuentro. Tras el reflote de una columna del diputado de Revolución Democrática, Giorgio Jackson, a The Clinic en 2012 donde señaló: “Yo dono hoy a la Teletón porque no existe una política que se haga cargo del tema, y me da vergüenza tener que hacerlo”. Este viernes salió a aclarar sus dichos y explicó a través de Twitter: «Como todos los años, en familia, donamos a la teletón pero que me encantaría que el derecho a rehabilitación no dependiera de la caridad».
No copie la fake news, acá está la noticia del 2011, en la que decía que, como todos los años, en familia, donamos a la teletón pero que me encantaría que el derecho a rehabilitación no dependiera de la caridad. https://t.co/sY9t7fr7Xk
— Giorgio Jackson ???? (@GiorgioJackson) December 3, 2021
Sin embargo, en el texto que escribió para The Clinic planteó: «Espero que en un par de años no sea necesario hacer este tipo de colecta por la salud de la gente, me niego a pensar que los derechos de las personas dependan de la caridad». Además, la columna dice que «las 27 horas de la Teletón –separarlo de la Fundación Teletón- y las semanas previas, parecen más un supermercado de caridad que una campaña de concientización destinada a superar el problema de fondo que hay tras la discapacidad», y alude al «marketing gratuito de las empresas».
En su crítica, Jackson califica la Teletón como un «show» y asegura que lo que realmente le molesta es «que se blanquee la imagen de muchos empresarios que se oponen a reformas tributarias y se aprovechan de una plataforma de publicidad, morbo y sensibilidad social para cumplir con su ‘responsabilidad social empresarial’”.
La opinión del parlamentario es compartida por la excandidata presidencial del Frente Amplio y constituyente Beatriz Sánchez, quien publicó una columna de opinión en Publimetro donde explicaba que si bien la Teletón «tiene claros, también tiene oscuros». «Es un lugar donde las grandes compañías «blanquean» su imagen, se «hacen» los buenos, se presentan como ‘caritativos’, se aprovechan de la ‘buena onda’ para hacer dos meses de publicidad a cambio de entregar varios millones de pesos», escribió a fines de noviembre en 2016.
Y pese a que aseguró no desconocer el trabajo que hacen los centros de rehabilitación, cuestionó la participación del Estado en esta materia. «¿Es acaso que el Estado tiene tal problema con garantizar la salud de los chilenos que prefiere «hacerse el leso» y dejar que la caridad popular sustente lo que se ofrece a personas discapacitadas?», cuestionó Sánchez.
Por su parte, la diputada del Partido Comunista, Camila Vallejo, fue más allá en sus críticas haciendo énfasis en avanzar hacia un impuesto a los «súper ricos», término con el que describió a Don Francisco. «Se valora que un súper rico como Don Francisco organice una campaña solidaria, pero 32 mil millones de pesos (recaudación Teletón 2018) es harto menos que los 5.000 millones de dólares que recaudaría un impuesto a los súper ricos», planteó en una entrevista que concedió en agosto de 2020 en Chilevisión.
Se valora que un súper rico como Don Francisco organice una campaña solidaria, pero 32 mil millones de pesos (recaudación Teletón 2018) es harto menos que los 5.000 millones de dólares q recaudaría un #ImpuestoALosSuperRicos pic.twitter.com/0uUGTASjkD
— Camila Vallejo Dowling (@camila_vallejo) August 28, 2020
Más recientemente y desde la Convención Constitucional, la constituyente Malucha Pinto opinó en el programa Estallido Cultural en agosto de este año que “la Teletón no debe ser un espacio que tengamos que seguir propiciando”, ya que había cumplido su ciclo de aporte y, tras las manifestaciones, el país ha cambiado.
“La Teletón cumplió un rol, sin lugar a dudas, yo creo que varios roles. Uno, fue visibilizar la discapacidad de la manera como lo hizo, en un principio muy denigrante. Siempre tuve muchos reparos con eso, desde la lástima”, afirmó entonces Pinto y también criticó al animador Mario Kreutzberger (Don Francisco).
Las críticas a la Teletón no son recientes, sino que surgieron desde los tempranos 2000 cuando Gladys Marín afirmó que era el Estado quien debía hacerse cargo de los niños y jóvenes con discapacidad en vez de recurrir a un evento televisivo para conseguir dichos recursos.
Incluso, en 2014 el Comité de los Derechos de las Personas con Discapacidad de la ONU emitió un comunicado en el cual rechazaba la realización de la Teletón en México por “promover estereotipos de las personas con discapacidad como sujetos de caridad e impedir que se posicione el concepto de sujetos de derechos”. Y pese a que el documento no iba dirigido directamente a Chile, Don Francisco salió a desmentir las acusaciones: “Ustedes saben que eso no es verdad (…) quizás, alguna vez, pudimos cometer un error. Nosotros estamos promoviendo la rehabilitación, el esfuerzo de la familia”.
La defensa de Don Francisco
Según la memoria de 2020, Teletón, en sus 14 centros a nivel nacional, prestó servicio a 29.776 personas, en más 839 mil atenciones, 1.950 comenzaron con un proceso de rehabilitación y se realizaron 475 cirugías, 600 debieron ser postergadas por la alta demanda de camas UCI por Covid-19. En período de pandemia 75% de los pacientes se debió atender de forma remota, sin embargo, la fundación entregó cajas de ayuda, medicamentos, entre otros implementos.
El último evento televisivo se realizó en septiembre de 2020 con carácter de «urgencia» luego de que el de 2019 tuviera que ser cancelado. De igual forma, en los últimos 12 meses entregó más de 31.000 prótesis y ortesis para pacientes en proceso de rehabilitación y realizó más de 1.000 cirugías, doblando la cifra del año anterior.
En tanto, los voceros y representantes de la institución todos los años alzan la voz para desmentir los cuestionamiento y hacerle frente a las críticas. Ha sido el mismo Mario Kreutzberger, creador, fundador y conductor del evento, que ante los señalamientos sobre si recibía dinero de la fundación, respondió: «Es una estupidez», y agregó que «nunca ha pasado un peso de la Teletón por mis manos. Nunca, ni va a pasar».
Al mismo tiempo, recientemente en el programa «Contigo en Directo» de Chilevisión explicó que para quienes dudan de la transparencia de la Fundación Teletón, pueden “entrar a la página de transparencia de la Teletón, donde todos los días se dice lo que hace la Teletón en Arica, en Iquique, en Antofagasta, en Coyhaique y en todos los puntos del país”. Y es que a través de la página web se pueden consultar los gastos de los diferentes centros y revisar la cuenta pública, sobre todo tras la alianza con Chile Transparente para avanzar en esta materia.
Por ejemplo, los estados financieros de 2020 revelan que el 86% de los recursos recaudados se destinaron a los Institutos Teletón, que atienden a 30.000 pacientes en los 14 centros. Mientras que el 14% de lo recaudado en la campaña se destinó a cubrir los costos para convocar, comunicar y recaudar.
La tarea del instituto Teletón incluye rehabilitar a niños, niñas y jóvenes con algún tipo de discapacidad, portadores de una condición de salud congénita o adquirida, que ocasiona deficiencia de origen neuro-motor hasta los 20 años, o menores de 3 años portadores de retraso del desarrollo de predominio motor y excepcionalmente jóvenes entre los 20 y 24 años de edad, que sufren traumatismo encéfalo craneano (TEC), lesión medular o amputación, que consulten a Teletón antes de los 12 meses de ocurrido el suceso.
En esta línea, la labor de los centros se vio reflejada en los Juegos Paralímpicos de este año, donde de los 19 deportistas chilenos que concurrieron a la actividad deportiva, 10 se formaron en la Teletón. El reconocimiento también fue entregado por Alberto Abarza, el atleta que obtuvo tres medallas de oro en natación, le dio el crédito a la Teletón tras haber ganado el oro en los 200 metros de espalda.
“Estoy viviendo un sueño que partió cuando tenía dos años, cuando ingresé a la piscina de la Teletón. Estoy muy feliz. También muchas gracias al Comité Paralímpico por lo que hacen. Que se hayan transmitido los juegos es un tremendo avance para la inclusión”, declaró Abarza tras el triunfo.
Que resentidos son estos personajes, incapaces siquiera de reconocer una obra tan querida por todos los chilenos. Debería darles vergüenza.