Queda menos de una semana para que asuma el próximo gobierno, el miércoles 11 de marzo, y para que el presidente electo Gabriel Boric comience su período presidencial acompañado de sus ministros, subsecretarios y delegados presidenciales. Eso sí, aún hay cargos que designar: 12 altos directivos de Alta Dirección Pública (ADP) que el mandatario puede nombrar “a dedo”.
A estas designaciones se les conoce como las “balas de plata” con las que cuenta el Jefe de Estado y corresponden a 12 de los 143 cargos de primer nivel jerárquico ADP, los que en períodos presidenciales anteriores despertaron especial interés por el menú de cupos habilitados. Corresponden a cargos especializados que son parte de empresas públicas, entidades fiscalizadoras y de regulación. Además, dichos organismos interactúa de forma multilateral con el exterior y con el sector privado.
En el caso del actual presidente Sebastián Piñera cuando asumió en 2018 asignó 50% de estas designaciones a entidades económicas y utilizó sus 12 posibilidades: Fonasa, Instituto Nacional de Deportes, Conadi, Sename, SEA, Dirección del Trabajo, Superintendencia de Educación, Indap, Sernac, INE, Tesorería, y Fiscalía del MOP.
Ahora la estrategia, de acuerdo con miembros cercanos al próximo gobierno, debería ser priorizar los directivos ligados a áreas de beneficios sociales y que guarden relación con las propuestas del programa de gobierno de Boric.
“El criterio debe ser tomar todos aquellos servicios que tienen a su cargo políticas públicas que llegan de manera directa a la ciudadanía, porque si desde el primer momento cuentas con estos servicios, puedes implementar rápidamente lo que es tú política; a diferencia de si continúan allí directores que son afines al gobierno saliente”, explican fuera de micrófono desde la interna del Partido Socialista.
El exsecretario de la Democracia Cristiana y analista político, Víctor Maldonado, coincide en que se deben priorizar aquellas áreas con mayor contacto con la ciudadanía. “Se requieren más habilidades que solamente saber de una materia técnica porque se está en contacto con personas y a un gobierno siempre se le interesa tener el pulso de cómo está la opinión ciudadana y cuáles son sus necesidades”, describe.
En tanto, el académico de la Universidad de Talca y analista político, Mauricio Morales, señala que “Boric necesita armar una tercera línea más técnica que política. Dado que los temas sociales fueron parte central de su programa, deberá nombrar personas con experiencia en cada una de ellas, y que sean capaces de entender que las restricciones económicas a las que se verán sometidos sus servicios, responden principalmente a la crisis que arrastra el país y a las condiciones internacionales”.
Es así como argumentan que Fonasa, la Superintendencia de Educación, la Dirección del Trabajo y el SEA podrían ser parte de las 11 balas de plata que le quedan a Boric; además de incluir el Servicio Nacional de Migraciones, el Sence, Fosis e Indap.
Fonasa, Superintendencia de Educación, Dirección del Trabajo y SEA
Priorizar el área social y los aspectos ligados a su programa son parte de las estrategias que podría seguir el próximo Mandatario, manteniendo especial énfasis en sus principales propuestas de campaña: Salud, Previsión Social, Educación y Medioambiente.
Para Maldonado, la Dirección del Trabajo es un área que debe ser solicitada por el frenteamplista. “Fue un área intervenida por Piñera para debilitar la expresión sindical en los últimos cuatro años, eso fue horrible y la DT siempre ha sido una muy activa en la defensa de los derechos de los trabajadores, por lo tanto, si hay alguien que va a gritar para que ese puesto vuelva a ser de confianza, será la ministra (Jeannette Jara, PC). Lo van a pedir, porque así volvería a su tradición, es un servicio sumamente comprometido con su tarea y lo tuvieron maniatado cuatro años”, afirma.
Otra de las designaciones podría estar ligada al área de salud, uno de los aspectos que ha prometido mejorar el gobierno de Boric. Fonasa resuena entre los analistas y cercanos al próximo gobierno como una de las posibles balas de plata.
Esta institución también fue una de las seleccionadas por el Presidente Piñera. En ese entonces la estrategia que se utilizó fue elegir a la entidad por su impacto en la ciudadanía. Fuentes que participaron de la definición de esos cargos en 2018 argumentan que se buscaba que el director de Fonasa fuese alguien de la “confianza” del gobierno, sobre todo porque atiende al 80% de las personas, con un impacto inmediato en la vida de las personas. “Un criterio clave era hacer cambios que produjeran impacto y que nos permitieran avanzar en algunas ideas que teníamos nosotros en nuestro programa de gobierno”, explican.
Al mismo tiempo, apuntan a que en ese entonces se priorizó la masividad y la relevancia del servicio. Elementos que también podrían ser considerados por el magallánico en su elección, para la cual cuenta con tres meses desde asumida la Presidencia.
El economista de Libertad y Desarrollo, Tomás Flores, plantea que incluir a Fonasa en la nómina de cargos elegidos también guarda relación con que “parte importante del Colegio Médico llegó al gobierno, desde le Ministerio de Interior hacia abajo. Creo que ahí efectivamente se va a ejercer esa facultad. No es fácil la reforma que están proponiendo, desmantelar las Isapres no es fácil, o las compañías de seguro privadas”.
Maldonado advierte que otro factor a considerar es la presión que comenzarán a ejercer los partidos políticos por ser parte de los elegidos. Sobre todo porque para ser designado en el primer y segundo nivel del Estado se exigen entre 5 y 10 años mínimos de experiencia laboral, un requisito que no necesariamente cumple el frenteamplismo por su juventud. No obstante, desde la interna socialista aseguran que esa conversación aún no se ha concretado con Boric.
“Cada partido va a encontrar que hay un sujeto de lo más lindo que justo tiene las condiciones para eso. Pero se tiene que centrar en el acceso a la salud, en el tema previsional y en educación, la cuarta prioridad es la ecológica. Si es coherente con su programa tiene áreas de sumo interés, más seguridad que es el que acaba de agregar que es por la condición mínima de atender un problema grave y hay que concentrarse en eso”, sostiene Maldonado.
En esta línea, el exsubsecretario de la DC apunta a Fonasa, la Superintendencia de Educación, la Dirección del Trabajo y el Servicio de Evaluación Ambiental como algunas de las posibles “balas de plata”.
En todo caso, Morales indica que “los jefes de servicio en materias sociales, muy probablemente dispondrán de menores recursos, por lo que deberán ser acompañados de un buen equipo en materia económica a fin de hacer más eficiente su gestión. En síntesis, Boric requiere un sólido equipo de tecnócratas que sea capaz de llevar adelante el programa de gobierno con una billetera mucho más estrecha de lo que se imaginó”.
Servicio Nacional de Migraciones
Pese a no ser una de las prioridades de gobierno, analistas explican que Boric deberá redefinir el director del Servicio Nacional de Migraciones, cargo que actualmente ocupa Álvaro Bellolio, como una forma de hacer frente a la actual crisis migratoria que atraviesa el norte del país.
Cercanos al próximo gobierno concuerdan en que la designación de este servicio estaría más bien “obligada” por la contingencia actual, sin embargo, optar por ella como una “bala de plata” daría una señal de querer solucionar el conflicto. Maldonado, en tanto, señala que precisamente las áreas migratoria y de seguridad serán las de mayor conflicto para el exparlamentario.
“Necesita un brazo que pueda responder cada vez que dé una instrucción, por eso es mejor que sea alguien de mucha confianza porque no puede empezar a discutir las medidas, eso es como una precaución. En el área de la seguridad es donde el gobierno que asume ahora tiene su mayor prueba y su mayor déficit probablemente de entrenamiento de personal”, dice.
Es precisamente en este cargo que ya hay algunos nombres que resuenan como posibles. Alguno de ellos son el sociólogo Luis Eduardo Thayer que ayudó a desarrollar la campaña de Gabriel Boric y que es crítico a la nueva ley de migraciones. Otro nombre es el de Matías Libuy, del círculo de confianza de Izkia Siches, y el exdirector del Servicio Jesuita a Migrantes entre 2014 y 2017, Miguel Jaksic.
Sence, Fosis e Indap
En línea con la estrategia de ocupar estos altos cargos de Alta Dirección Pública en asuntos que tengan relevancia en el programa. Desde la centroizquierda, integrantes del llamado “socialismo democrático” señalan que el Fosis, que describen como el servicio más importante de Desarrollo Social, debiera estar. El Sence en trabajo o el Indap en agricultura “también deberían ser parte de la estrategia”, pues tales instituciones corresponden a la arista social, permiten aportar a los compromisos adquiridos en el programa y así cumplirlos con mayor rapidez.
Por ejemplo, el Sence en “el tema de la recapacitación para la reconversión laboral después de una pandemia y después de que se vino todo este cambio de vida con todo lo telemático y con la caída de ciertas cosas, es bien relevante”, enfatizan fuera de micrófono.
Instituto Nacional de deportes y Servicio Nacional del Patrimonio Cultural
Otros ámbitos que podrían se abordados son el deporte y la cultura, asuntos que han sido mencionados también por el magallánico. “Tengo la impresión de que los gobiernos debieran siempre priorizar aquellas áreas donde el servicio está en mayor contacto con población, con usuario. Entonces eso es lo que se relaciona con Deporte, Cultura y con prestación de servicios directos”, asevera Maldonado.
En todo caso, explica, no le conviene a Boric “engolosinarse” con los nombramientos porque “después se hace responsable también de que esas nominaciones cumplan bien con su tarea. Entonces, las cuatro reformas que el gobierno se comprometió a realizar en materia de Previsión, Salud y Educación son las materias que hay que reactivar de primero”.
Al respecto, Morales enfatiza en que “un Presidente de la República no puede renunciar a nombramientos tan relevantes como los jefes de servicio. Son parte del equipo de gobierno y autoridades claves en la ejecución de las políticas públicas”.
Ahora bien, también existen entidades que, según Flores, no serán parte de las designaciones. “Tesorería, el Sernac, yo creo que en esos casos va a haber agenda de continuidad. Yo no veo ahí cambios muy sustanciales. O el INE, que en el segundo gobierno del Presidente Piñera lo ocupó, ya hay una directora nombrada por alta dirección pública y probablemente no es un foco de tensión en términos políticos porque al final en esta designación es la política la que manda”.
¿Qué hizo el gobierno pasado?
En el segundo mandato del Presidente Sebastián Piñera utilizaron las 12 “balas de plata”. Además de Fonasa, otra de las oficinas asignadas fue la Superintendencia de Educación, un tema que también tenía peso en el programa de gobierno y con relevancia desde el punto de vista de las políticas públicas.
Precisamente, con ese criterio, dicen fuentes cercanas al Gobierno en el momento de las definiciones, se eligió designar la Fiscalía del MOP, ya que según el diagnóstico hecho en esa instancia se “trababan” gran parte de los proyectos de infraestructura y de concesiones. Por lo tanto, “si bien es un cargo que no tiene ninguna relevancia desde el punto de vista de la atención a los ciudadanos, es tremendamente relevante para agilizar o frenar la inversión pública”, argumentan. Misma lógica que se usó con la Tesorería.
Indican que es “altamente probable” que algunos de los cargos seleccionados por el Presidente en ejercicio los designe también Boric. Por ejemplo, en educación por tratarse de un tema muy sensible para la izquierda, por lo que buscarán designar a personas que estén en sintonía con el programa de gobierno de Apruebo Dignidad.