La detención en México de Raúl Escobar, autor material del crimen del senador Jaime Guzmán, llevó a la presidenta de la UDI, la senadora Jacqueline Van Rysselberghe, a viajar a dicho país para monitorear las reales alternativas de que sea extraditado a nuestro país.

Van Rysselberghe tuvo una intensa agenda que incluyó un encuentro con  el procurador general de México, Raúl Cervantes (equivalente al fiscal nacional chileno), con el subprocurador jurídico de Asuntos Internacionales, Alberto Elías, con el embajador de la Subsecretaría para América Latina y el Caribe, Víctor Hugo Morales, y con el embajador de Chile en México, Ricardo Núñez.

En entrevista con “El Líbero”, la presidenta de la UDI, que viajó con la diputada Claudia Nogueira y el secretario general, Pablo Terrazas, relata sus encuentros con dichas autoridades y los compromisos que adquirieron con aumentar la seguridad del ex frentista y facilitar su extradición, amparados en un convenio entre ambos países sobre el tema.

Van Rysselberghe: «En México nos dieron garantías de que Raúl Escobar no podrá escaparse»

– ¿Cómo le fue en sus reuniones con las autoridades mexicanas?

– Nos fue bastante bien. Una de las preocupaciones que teníamos era que Raúl Escobar se pudiera escapar de la cárcel de Guanajuato, que es relativamente segura pero no es de alta seguridad. Se lo planteamos al procurador y prometió que reforzarán la seguridad de la cárcel con personas de Interpol, y que la próxima semana lo cambiarán a una cárcel de alta seguridad. Además, nos contaron que la Procuraduría está abriendo un expediente por delincuencia organizada, porque ellos sospechan que también estaba metido con un montón de otros secuestros, incluido de un ex candidato presidencial. La apertura de esa carpeta dejaría el caso eventualmente en manos de la Procuraduría General, más que en el gobierno federal de Guanajuato, donde está hoy. Eso en realidad es bastante conveniente.

– ¿En qué está el proceso de extradición?

– Como vendrá un proceso judicial en México por el secuestro, la extradición, sobre la cual hay bastante buena disposición, correría en forma paralela, pero probablemente el proceso de extradición se termine antes que el juicio del secuestro. De manera que, de acuerdo al tratado de extradición firmado con Chile en 1991, eventualmente pudiera verse la entrega temporal de Raúl Escobar a Chile para terminar los trámites judiciales acá. Luego volvería a México para cumplir su pena allá por el secuestro y regresaría a Chile para cumplir su condena por el asesinato del senador Guzmán.

– ¿Cómo se podría usar el tratado de extradición?

– No puede ejecutarse la extradición sino hasta que se cumpla la condena de México, pero existe una figura intermedia en el artículo 20 del tratado de extradición, que permite la entrega temporal señalada anteriormente.

– ¿Su viaje la deja satisfecha?

– Sí, porque nos han dado garantías de que no podrá escaparse, y nos transmitió la convicción de que el crimen de Guzmán no quedará impune. En ese proceso de extradición es parte el gobierno mexicano, y es importante que dé señales claras de que la violencia política es duramente castigada. México tiene muy buena disposición de generar condiciones para satisfacer a ambos países. Allá exigen que quienes participen en secuestros sean condenados, y nosotros necesitamos dar señales de que el crimen de un senador no puede quedar sin condena. Buscar una figura intermedia en que se permita que ambos países puedan satisfacer sus necesidades me parece adecuado.

– ¿Cuáles son los plazos de dichos procesos?

-Es posible que durante la próxima semana la Corte Suprema chilena envíe la solicitud de extradición formal a México, que llega a la embajada y luego a la Procuraduría Regional. Eso debiera demorar un par de meses en estar resuelto. Después hay que evaluar en qué estará en ese momento el proceso judicial del secuestro, para solicitar la entrega temporal de Escobar para terminar el proceso en Chile. Nos interesa que pueda ser condenado en Chile.

– ¿Qué le parece la opinión del presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, de que el asesinato de Guzmán fue un “daño colateral”?

-Encuentro lamentables esas declaraciones. De la misma manera como Hugo Gutiérrez y Gabriel Boric no quisieron aprobar el proyecto de acuerdo de la extradición de Escobar, me parece que eso justifica la violencia. Creo que la violencia nunca se debe justificar.

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