El 30 de agosto el Congreso despachó la Ley de Usurpaciones, sin embargo, el Gobierno de inmediato presentó sus reparos y anunció un veto, que será ingresado este viernes, según confirmó la ministra del Interior, Carolina Tohá. En este escenario, es ella quien lidera las negociaciones con el oficialismo y la oposición con el fin de “tratar de construir un acuerdo”, como señaló este martes.
En Mirada Líbero abordamos este tema junto a una de las autoras del proyecto de ley, la senadora del Partido Republicano, Carmen Gloria Aravena, quien afirmó que “hay un porcentaje del oficialismo más cercano al Frente Amplio y al Partido Comunista, que no está de acuerdo, porque creen que es legítimo que una persona que no tenga suelo, que no tenga vivienda, pueda usurpar o tomarse un terreno”.
Añadió que “si el gobierno presenta un veto para eliminar las penas de cárcel en ambas usurpaciones (la no violenta y la violenta, como establece el proyecto de ley), estamos complicados. Hay cosas que no debieran transarse. Y si solo van a limitarse al tema de la legítima defensa privilegiada, creo que el proyecto no va a desvirtuarse, y tendremos lo que queremos, que es una ley actualizada, que realmente sirva de algo, que no queden 220 mil hectáreas usurpadas, que es la amenaza de la CAM hoy día”.
La senadora por La Araucanía aseguró que el delito de usurpación es el origen del terrorismo en la Macrozona Sur y le pidió al Gobierno sincerar las posturas. “No le coloquemos tanta importancia a la legítima defensa privilegiada, cuando lo que hay detrás para el gobierno es una presión tremenda de los sectores más radicales, que efectivamente están apoyando este tipo de delitos tan graves para el país y que han generado tanto dolor. Este es un delito grave y no estamos pidiendo ningún favor. El Gobierno cuando asume, asume con la Constitución vigente, y ésta dice que tenemos que tener libre tránsito, y ese es un derecho que en la Macrozona Sur no tenemos”, manifestó.
La legítima defensa privilegiada o la autotutela es uno de los elementos que más critica el oficialismo, puesto que han dicho que “podría fomentar el enfrentamiento entre civiles”. Frente a esto, Aravena explicó que la indicación sobre la legítima defensa fue aprobada en ambas comisiones, “la ministra Tohá no estuvo conforme con la redacción, pero tampoco llegaron con propuestas a la negociación de meses que habíamos tenido con La Moneda para llegar a acuerdo, y llegan con una propuesta donde el proyecto se desnaturalizaba, y posteriormente hubo molestia de parte de ella respecto a la negativa de ambas cámaras de no aceptar la indicación. Creo que hubo un mal manejo en este proyecto en particular”.
En este sentido, y sobre la preocupación del gobierno, la senadora afirmó que “si el Gobierno no se atreve a legislar para terminar con este tipo de crimen organizado, alguien tiene que hacerlo. Yo tengo la esperanza de que prime la razón, la lógica, todos tenemos necesidades, pero nadie puede robar, porque no tiene lo que tiene el vecino de al lado. Han pasado 25 años, 220 mil hectáreas usurpadas, muchas personas fallecidas, miles de incendios, y nunca he visto a un agricultor que defienda sus tierras al punto de matar a un mapuche. Los mapuches que han fallecidos son víctimas de estos grupos”.
«Encuentro bien preocupante que el Gobierno dé señales de estar en contra (de la ley), no hay explicaciones para que esto ocurra, porque pudo haberse promulgado la ley y al otro día haber presentado un proyecto de mejora y haber eliminado o mejorado la redacción de la legítima defensa privilegiada si ese hubiera sido el objetivo. Hay señales del gobierno a un sector que cree que por la fuerza pueden tomarse los terrenos, la vida y el Estado, y que hace cuatro años trataron de tomar también el Gobierno a través de la violencia”, sostuvo.
“Hubiera querido escuchar al Gobierno muy temprano, después de que la CAM declarara la guerra”
La senadora del Partido Republicano se refirió también a las amenazas de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), orgánica terrorista que, a través de un comunicado, advirtió que “a pesar de la ofensiva represiva hacia el movimiento mapuche autonomista por parte de éste Gobierno servil y lacayo a los grandes grupos económicos, manifestamos con orgullo que no hemos perdido, ni retrocedido ni un metro, ni una hectárea de territorio recuperado (…). Defenderemos hasta las últimas consecuencias lo logrado en el plano territorial, político y cultural mapuche, hasta tomar las armas si resulta necesario”.
La parlamentaria respondió al grupo y dijo que “las armas se las tomaron hace 25 años, no hoy día”. Al mismo tiempo, puso énfasis en el rol que tiene Carabineros al enfrentarse a estos grupos y las pocas herramientas que poseen. “El otro día hubo un enfrentamiento en Temucuicui con un importante contingente de carabineros por ocho horas, con los militares ahí. Y lo que hicieron los carabineros fue defenderse, los militares no actuaron por orden de las autoridades, y los carabineros debieron salir arrancando con todos su vehículos dañados. Con esto, es evidente que generan temor en la población, algo propio del terrorismo”, sostuvo.
Y apuntó al Gobierno: “Hubiera querido escuchar al Gobierno muy temprano, después de que la CAM declarara una guerra contra el Gobierno, porque lo que tienen es una guerrilla, y el Gobierno tiene que actuar. Pero aquí el silencio otorga, y eso no es bueno, porque hay que entender que las personas están desarrollando su actividad con miedo y lo han perdido todo. Esto vuelve a fortalecer el hecho de que al terrorismo hay que atacarlo con más inteligencia, con una ley antiterrorista, que no sé por qué no se está tramitando con carácter de urgente, y hay que fortalecer a Carabineros y a los militares”.
Seamos claros, gobierno apoya actos de violencia