Han transcurrido dos semanas desde la noche de violencia en La Araucanía que terminó con el incendio en las municipalidades de Ercilla y Traiguén y con daños severos en los edificios de Curacautín y Victoria. Esa misma jornada hubo sucesos en otras dos comunas de la Provincia de Malleco: Collipulli y Los Sauces, entre los que se cuentan el incendio de una capilla, una sede vecinal y un jardín infantil. 

De acuerdo con cifras del Barómetro de Conflictos con Connotación Indígena, que elabora cada año la Multigremial de La Araucanía, es precisamente la Provincia de Malleco la que concentra el mayor número de hechos de violencia, al menos desde el año 2013. “Los ataques son bien localizados. De hecho, el primer ataque que hubo en 1997, que la CAM reivindica como su primer acto violento, fue en la comuna de Lumaco que pertenece a Malleco. Siempre se ha dicho que la CAM y sus organizaciones tienen su núcleo y nacieron en las comunas de Tirúa y Cañete, de la Provincia de Arauco -Biobío-, pero que son colindantes con la Provincia de Malleco”, explica Juan Pablo Lepín, director ejecutivo de la Multigremial. 

Además de la justificación geográfica, la pobreza se constituye como otro de los caldos de cultivo para la violencia. La tasa de pobreza de ingreso en La Araucanía (17,2%) dobla al promedio nacional (8,6%), según los resultados de la encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (Casen) 2017, datos que además son anteriores al estallido de 2019 y a la pandemia por el coronavirus de 2020. 

La IX Región se divide en dos provincias: Malleco y Cautín. La primera está conformada por 12 comunas; y la segunda por 20 (32 municipios en total). El Observatorio Económico y Social de la Universidad de La Frontera (OES-UFRO) elaboró un ranking de pobreza por ingresos en las comunas de la región, tomando los datos de la Casen, encontró que en los primeros 20 lugares, 8 son comunas pertenecientes a Malleco, que son Galvarino, Lonquimay, Lumaco, Ercilla, Los Sauces, Collipulli, Victoria y Traiguén. De estas, Ercilla y Collipulli aparecen como dos de las tres comunas en las que más hechos de violencia ocurren en la región cada año entre 2013 y 2019, según los datos del Barómetro de la Multigremial. Lepín resume que en Malleco hay mayor ruralidad, pobreza y mayor cantidad de comunidades indígenas. De los 1.424 hechos de violencia en la IX Región, que el Barómetro contabiliza entre 2013 y 2019, 1.114 (78,23%) de esos sucesos ocurrieron en la Provincia de Malleco.

Jaime Huenchuñir, presidente de la Confederación Económica Mapuche, entrega antecedentes históricos. Argumenta que la situación de pobreza del pueblo mapuche no es una constante, por el contrario, dice, es una situación que comenzó hace cuatro o cinco generaciones con “el mal llamado proceso de pacificación”. Recuerda que antes de que esto ocurriera los mapuche tenían la mayor producción de ganado del cono sur, eran uno de los mayores exportadores de carne seca, y de sal. Al tiempo que también desarrollaban la textilería y la orfebrería.

“Se corta este progreso de golpe, se usurpan las tierras, las entregan a los colonos y se somete al mapuche a la pobreza. Esa es una herida abierta y ese hecho histórico se utiliza por grupos que quieren politizar el conflicto azuzando el resentimiento social. Es un caldo de cultivo muy grande para que sectores políticos con intereses oscuros vengan, se instalen en La Araucanía y promuevan estos temas enarbolando la causa mapuche. Por eso les sirve necesariamente que el pueblo mapuche se mantenga pobre”, analiza Huenchuñir.  

El presidente de la Confederación Económica Mapuche agrega que “es muy fácil para cualquier grupo, sea político o religioso, utilizar un discurso que diga ‘levántate, ponte de pie, lucha, utiliza la vía violenta, no importa y anda en contra de estos enemigos que te han quitado todo’. Es propicio porque esos hechos realmente ocurrieron, esa es la complejidad de cómo la pobreza sirve de combustible para que la violencia continúe como una forma de lucha legítima para algunos, aunque no lo sea”. Señala que dentro de la Confederación consideran que es el diálogo, el trabajo, y la recuperación económica la vía “para conseguir restaurar gran parte de nuestra historia, nuestra cultura e incluso nuestras tierras”.

Ercilla y Collipulli, las comunas más afectadas

Es así como según los antecedentes entregados por la Multigremial, cuyos informes se elaboran con datos entregados por la Fiscalía de La Araucanía, la mayoría de los hechos de violencia en la IX Región ocurren en comunas de Malleco.

En 2013, de los 250 atentados que hubo en La Araucanía 225 fueron en Malleco, principalmente en Ercilla, Collipulli y Angol. En 2014 hubo 209 ataques, 160 en Malleco, las comunas más afectadas fueron Ercilla, Angol y Collipulli. En 2015 fueron 210 hechos violentos, 143 en esa provincia, nuevamente Ercilla, Collipulli y Angol tuvieron mayor número de ataques en esa área. 

Para el año 2016 disminuyó el número total de atentados a 106, de ese total 70 ocurrieron en Malleco, principalmente en Ercilla y Collipulli. 2017 tuvo 140 hechos violentos y 107 fueron en Malleco (en Ercilla, Collipulli y Victoria, la mayoría). En 2018 nuevamente aumentó el número de sucesos superando los 200. Hubo 258 sucesos, 190 de ellos en Malleco, afectando principalmente a Ercilla, Collipulli y Victoria. Mismas comunas que fueron las más afectadas en 2019, cuando de los 253 ataques totales, 216 ocurrieron en Malleco. 

En una entrevista concedida a El Líbero, Luis Mayol, ex intendente de La Araucanía, tras los desórdenes que hubo en la región entre el 1 y 2 de agosto, aseveró que las tomas ocurrieron en comunas que se consideran emblemáticas dentro de la conflictividad de los temas mapuche. Recordó que en Ercilla está Temucuicui, un área cerrada a las visitas, en la que cada vez se han hecho más frecuentes las noticias por decomisos de vehículos robados y cultivos de marihuana.

En el programa Mirada Líbero en Agricultura, el ministro de Obras Públicas y ex titular de Desarrollo Social, Alfredo Moreno, indicó que en las comunidades en las que hay influencia de las drogas opera una lógica similar a las áreas tomadas en ciudades como Santiago. “En los lugares tomados por el narco, no entra la policía, y la ley del más fuerte comienza a imperar. En esos lugares a la gente no le queda otra que vivir de acuerdo con esas reglas. Y el Estado no puede permitir eso, porque de ahí en adelante, esas personas, aparte de vivir una tortura, están sometidos a todo tipo de delitos”. 

Se han encontrado antecedentes de que en Temucuicui ocurre, por ejemplo, reducción de especies robadas, como autos y falsificación de patentes. A esto se suma el robo de madera. En su comparecencia ante la Comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara de Diputados, el 21 de noviembre de 2018, el ex general director de Carabineros, Hermes Soto, informó sobre Temucuicui: “Es histórico en ese sector el robo de la madera; pero no es el robo de la madera de una carretilla para llevarse la leña para la casa y calefaccionar. Es un robo permanente en gran volumen e incluso se ha visto bastante crecimiento en el tema de la marihuana y algunos otros elementos relacionados con droga en ambos sectores, tanto en Arauco, como en La Araucanía”. La audiencia ocurrió a raíz de la muerte de Camilo Catrillanca, en un operativo policial en Temucuicui, cuya investigación provocó la salida de Soto del cargo. 

El sello de los alcaldes

En la entrevista, Mayol hizo una radiografía de la composición política de la provincia, pues dice que es en los alcaldes donde se reflejan las tendencias sociales. “El alcalde de Ercilla es de la UDI y el de Collipulli de RN, eso demuestra que la mayoría de la gente no está en el tema de la violencia, quiere surgir. Esto es bastante emblemático. El alcalde de Curacautín es un alcalde DC bastante de centro, lo quiere mucho la gente, igual el de Victoria es de izquierda moderada, muy dedicado a su gente, a su ciudad, proactivo total”, afirmó Mayol.

Los datos del Servel correspondientes a las elecciones de 2016 dan cuenta de que en la Provincia de Malleco hay siete alcaldes que compitieron como independientes, incluyendo al de Collipulli, Manuel Macaya Ramírez, y al de Curacautín Jorge Saquel Albarran. Dos son de la coalición de gobierno Chile Vamos y de la UDI -Ercilla y Los Sauces- y la oposición tiene alcaldes en Lonquimay (DC), Lumaco (PS) y Purén (PPD). 

“Tomaron específicamente las municipalidades donde ellos creen que están radicados los temas de conflictividad, pero no pensaron que iba a pasar lo que ocurrió en Curacautín donde la misma población se organizó y movilizó para que les devolvieran la municipalidad. En la municipalidad pasa todo, donde se reparte todo tipo de documentaciones, la gente de los pueblos vive en torno a las municipalidades, por lo tanto es muy complicado cuando ocurren estas cosas. Vuelvo a repetir que son grupos muy violentos y muy menores, que a la gente la tienen aburrida”, opinó Mayol.

Huenchuñir subraya que el conflicto no responde a los alcaldes de turno, ya que es un problema que ha durado décadas y con mayor fuerza desde los 90 en adelante, cuando ocurren los primeros atentados, principalmente en esta zona. “En un período en que los gobiernos fueron derechamente de izquierda y centro izquierda. Entonces yo creo que esto va un poco más allá en ese ámbito, pero de que ocasionalmente, el tema mapuche le sirva a la oposición para poder hacer jugadas políticas, eso es obvio”.

Lepín, director ejecutivo de la Multigremial de la Araucanía, también alude a la gestión histórica que el Estado ha hecho del conflicto como una falla. “La pobreza engendra violencia porque muchas veces las personas que se ven sumidas en la pobreza no tienen otra alternativa. Por otro lado, como las políticas públicas que ha fomentado principalmente la izquierda en Chile son asistencialistas eso mismo ha ido fomentando que la gente se sume a la violencia, ya que se tiene el incentivo de que a la gente que ejerce más violencia le entregan beneficios, ya sea compra de tierras u otros beneficios de Indap”, asegura. 

Deja un comentario

Debes ser miembro Red Líbero para poder comentar. Inicia sesión o hazte miembro aquí.