El sector gastronómico es uno de los más golpeados durante la emergencia sanitaria. Hasta ahora no existe una fecha para volver a atender a clientes, pero desde este martes los restaurantes, cafés y establecimientos chilenos cuentan con un nuevo manual de recomendaciones para evitar contagios de coronavirus ante un eventual retorno de las operaciones.

Se trata del protocolo de manejo y prevención ante la Covid-19 en restaurantes, cafés y otros establecimientos análogos, emitido y presentado por el Ministerio de Economía, Fomento y Turismo. Para la Federación de Turismo (FEDETUR) es “una buena noticia” porque permitirá operar una “vez estén dadas las condiciones” y prepararse en la implementación que, además, garanticen la salud de turistas y trabajadores del rubro. “Dentro de estos protocolos hay medidas que son obligatorias y otras que son sugerencias y que en la industria tendremos en consideración, porque lo prioritario es que cuando se pueda funcionar sea con las máximas medidas de resguardo”, acotaron.

Según el instructivo, los locales deberán disponer de áreas segregadas de entrada y salida con «señalética visible a distancia» y mecanismos de desinfección de manos como alcohol gel. Solo se dejarán habilitados los accesos principales, apartando uno independiente para proveedores. Pero cuando esto no sea posible, el “ingreso de mercaderías debe realizarse en horarios diferentes al del servicio”.

Con las normas se intenta mantener espacios asépticos para prevenir los contagios de coronavirus. Así, es una obligación que los establecimientos  realicen una limpieza y desinfección exhaustiva del lugar bajo ventilación natural un día antes de abrir, siguiendo protocolos dictados por el Ministerio de Salud.

Combatir aglomeraciones

Para evitar aglomeraciones, el protocolo invita a promover el sistema de reservas, demarcar distancias en el piso o repartir números de atención para clientes en espera a ingresos de locales; y que el restaurante refleje en su exterior toda la información sobre sus servicios, horarios y capacidad.

Cada área común expondrá, en una zona visible, las recomendaciones para evitar contagios: uso de mascarillas, lavado de manos, saludo sin contacto físico, cubrir nariz y boca con antebrazo al toser o estornudar, no tocarse el rostro, entre otras. Si cuentan con páginas web o redes sociales, la referida información también se debe publicar ahí.

De acuerdo con el documento será necesario ventilar de forma permanente en los ambientes cerrados. “Cuando se utilicen sistemas de ventilación mecánica, evitar la recirculación del aire en el local. Utilizar sistemas que permitan la extracción y renovación del aire. Si procede, redistribuir mesas, generando flujos de circulación dentro de los establecimientos que permitan reducir al máximo la interacción entre clientes”, agrega.

Las mesas de los restaurantes o cafés se separarán con más de un metro de distancia entre sí, mientras que en servicios de buffet se colocarán barreras físicas con la finalidad de proteger los alimentos y se evitará el autoservicio. Es decir, el desayuno será servido directamente en las mesas.

También se insta a cerrar, incluso eliminar, las áreas infantiles o donde jueguen niños dentro de los establecimientos.

Sin platos compartidos

Según la norma, ahora es indispensable eliminar los “platos compartidos”, desinfectar alcuzas entre cada servicio, evitar el uso de servilleteros. De hecho, propone sustituir las clásicas cartas de menú por otra forma de mostrar la oferta de alimentos como escribir el repertorio en una pared, redes sociales o en sitios web.

Ningún detalle queda fuera del protocolo, que establece reglas estrictas dentro de las cocinas de restaurantes. Ahí, los trabajadores deberán usar mascarillas, evitar el uso de celulares y otros objetos personales, lavarse las manos constantemente, estar separados en zonas delimitadas, y se aplicará un riguroso procedimiento para la desinfección de la vajilla. “Los platos, cubiertos y demás utensilios idealmente deberán lavarse en máquinas lavavajillas, comprobando el funcionamiento de estos, a fin de que sean correctas las temperaturas alcanzadas (superior a 80°C en el enjuague) y la dosificación de productos químicos. De no ser posible lo anterior, el lavado manual deberá ser profundo cumplimiento con las temperaturas definidas para el correcto lavado y el secado deberá hacerse con papel absorbente desechable”, refiere el manual.

No escapan de la desinfección los desagües de la cocina y otros elementos que contengan grasa, además de refrigeradores o cualquier contenedor de comidas. Para cumplir con esto se indica que el encargado de la cocina deberá hacer inspecciones diarias.