Este jueves, la Tercera Sala de la Corte Suprema hizo oficial el fallo relativo al alza de la prima GES (Garantías Explícitas en Salud), y que dejaría sin efecto este aumento, derivando en devoluciones para los afiliados.
Se trata de un fallo que ha generado polémica por la crisis que generaría en el sistema privado de salud, sumándose además al fallo respecto a la aplicación de la tabla de factores.
Los efectos que podría generar esta resolución de la Corte Suprema fueron analizados en una nueva edición de Podcast Constitucional, conducido por Marcela Cubillos, exconvencional y directora del Observatorio Constitucional de la Universidad San Sebastián, junto con Gonzalo Arenas, abogado y académico de la USS, y que tiene como panelista a consejero constitucional Luis Alejandro Silva (Partido Republicano).
Cubillos criticó el fallo dado a conocer por la Tercera Sala, y señaló que “tenemos jueces haciendo política a través de fallos, que están permitiendo que se muera el sistema de libre elección en salud. Es decir, lo que no logró la Convención Constituyente a través del plebiscito, lo lograron los jueces a través de estos fallos”.
Asimismo, Silva apuntó a la Corte Suprema, que durante esta semana participó de la discusión de las enmiendas en el Consejo Constitucional. En la instancia, el presidente de la Corte Suprema, Juan Eduardo Fuentes Belmar, y el ministro del máximo tribunal, Leopoldo Llanos, cuestionaron las indicaciones que buscan la creación de un tribunal especial de jurisdicción y competencia nacional para juzgar ciertos delitos, como los de corrupción, terrorismo, crimen organizado, narcotráfico, entre otros.
En la oportunidad, Llanos señaló: “Nos parece problemática, pues rompe con el principio de competencia territorial dividida para conocer de un determinado grupo de asuntos en razón de la materia y en este caso la división por el territorio (…) lo que podría resultar con serios problemas”.
Ante esto, el consejero Silva señaló: “No me extraña, ese tipo de novedades generan siempre una cierta inquietud, porque rompen el estatus quo y porque sería el único tribunal dependiente de la Corte Suprema que tendría jurisdicción sobre todo el territorio y no solo una parte de él”. Arenas, en tanto, también fue crítico y aseguró que “la oposición de la Corte Suprema se entiende bastante poco, más todavía cuando la Suprema va a seguir siendo la autoridad jurisdiccional suprema del país. Es una visión bastante miope, no acorde con lo que requiere la complejidad de estos delitos”.
Cubillos: “Han pasado de hablar de una Constitución que debía regir por décadas, a una desechable”
En materia constitucional, las distintas comisiones del Consejo Constitucional siguen debatiendo las enmiendas ingresadas por las bancadas, lo que ha llevado a cuestionamientos de un lado y otro.
Silva criticó la postura del oficialismo e indicó que “ellos (el oficialismo) juegan con esta lógica de avance-retroceso que es tremendamente falaz y acomodaticia. Por otro lado se escucha mucho desde ese sector lo de no clausurar los debates. Entonces, para ellos el anteproyecto representa lo mejor que pudieron alcanzar, porque se hizo en un órgano con las fuerzas políticas empatadas, y en el fondo dicen que ‘ojalá que, ustedes que fueron elegidos por la gente, no lo toquen’. Entonces, cualquier cambio que el Consejo le haga al anteproyecto, el oficialismo dirá que es perjudicial”.
En esta misma línea, Cubillos respondió a esta idea de los sectores de izquierda y afirmó que “cuando ellos son minoría, hay que dejar todo abierto. Y por eso, hasta la propia ex Presidenta Bachelet dice que le gusta el texto de los expertos, porque quiere una Constitución habilitante. Han pasado de hablar de una Constitución que tenía que regir por décadas, a una de corto plazo, desechable, que los habilite”.
Por su parte, Arenas coincidió con la exministra y sostuvo que “en el fondo, quieren una Constitución que no se la juegue con nada, y que establezca simplemente un mecanismo para que el Congreso pueda refundar Chile cada tres o cuatro años. Es una irresponsabilidad. Pretender que esta Constitución no se pronuncie en prácticamente nada es, simplemente, no querer que haya constitución. Y quizás es una estrategia para decir que quieren votar en contra, que si bien todavía no lo manifiestan, están acumulando cada vez más fuerza para eso”.