Musicalmente, el año 1979 está al límite del abismo porque todo cambiaría a partir de 1980. Las baterías programadas, el neón y una cierta banalidad se tomarían la década. Estoy siendo injusto con los 80, pero es que me parece que las décadas anteriores y posteriores son musicalmente muy superiores. Y, en particular, 1979 tiene exponentes notables.
Mientras Margaret Thatcher asumía en Inglaterra, revoluciones se suscitaban en Nicaragua e Irán, y se lanzaba el primer walkman, algunos artistas lanzaban al público obras maestras. No se trata de discos uniformes que sean fácilmente identificables con su época pero ciertamente son obras que hacen de ese año un año especial.
London Calling de The Clash, The Wall de Pink Floyd, Highway to Hell de AC/DC, Damn the Torpedoes de Tom Petty and the Heartbreakers, Unknown Pleasures de Joy Division, y Rust Never Sleeps de Neil Young, son algunas de las joyas lanzadas en 1979 y que componen esta lista que celebra los 40 años de estas canciones.