Un grupo violento incendió ayer, en la noche, cuatro casas, disparó contra un retén de Carabineros y amenazó de muerte a personal de un consultorio en Quidico, en la comuna de Tirúa (Biobío).

El subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, condenó el ataque y expresó que los responsables pretenden «causar temor» en la población. «La situación ocurrida es de la mayor gravedad, resultaron cuatro cabañas de material ligero quemadas, pero los antecedentes asociados a los hechos son muy preliminares. Lo que se ve es que hubo un incidente previo, donde efectivamente llega una persona herida al Cesfam, hay una denuncia del personal de salud que habría sido agredida por personas que llegaron a tener algún tipo de relación con la persona herida y, a continuación, no sabemos si a consecuencia de ello, se producen los hechos de violencia ocurridos en la noche», explicó.

Galli pidió esperar los resultados de la investigación para determinar cuál es la vinculación entre ambos hechos. «Hay que esperar la investigación, hay que ver cuál es la vinculación entre ambos hechos y naturalmente condenar toda esta violencia, porque estas claramente lo que pretenden es causar temor en la población de Tirúa, de Quidico».

Los vecinos pidieron ayuda a través de audios que enviaron a periodistas. «Por favor, ayúdenme, están quemando Quidico con un salvajismo enorme, ya van tres casas quemadas y siguen los disparos y siguen quemando casas», decía un habitante del sector.