Las instituciones se perciben debilitadas. Se requiere de modernización y una voluntad política decidida a fortalecerlas, sólo así podrán responder al problema de inseguridad que vive Chile.
La actual crisis de seguridad ha contribuido a que eso suceda, sin embargo, la responsabilidad del debilitamiento institucional no recae necesariamente en dicha crisis. Podría incluso tratarse de un dilema similar al de la cultura popular donde se pregunta qué es primero, si el huevo o la gallina.
Las amenazas a la seguridad derivadas de una mayor organización de los grupos delictuales nacionales y de la llegada de bandas del crimen organizado transnacional podrán consolidarse solamente si al frente tienen una institucionalidad débil, fácilmente permeable y altamente corrompible, pues así podrán avanzar en un ambiente donde se perciba impunidad en vez de efectividad.
¿Por qué durante el 2022 logró entrar a Chile una gran cantidad de migrantes indocumentados? Porque faltaba una política que apuntara a una migración regulada y controlada que permitiera identificar a los extranjeros que hicieran ingreso al país. ¿Por qué la mitad de los delitos de homicidios ingresados a fiscalía el año pasado tenía imputado desconocido? Porque la institucionalidad fallaba y dejaba el espacio para que el sicariato avanzara a pasos agigantados, el 42% de los homicidios eran por ajuste de cuentas. ¿Por qué San Antonio es el puerto principal para el narcotráfico? Porque está fallando la fiscalización.
Entonces, ¿es la debilitada institucionalidad la que crea el crimen? No. Desde el origen de los tiempos que se habla del pecado, sin embargo, es más fácil que ese pecado avance cuando las señales son de mirar para el lado o de no querer asumir los costos que significa combatir el delito.
Hay un detalle que no se puede escapar, si la institucionalidad falla es porque quienes la lideran no han sido capaces de fortalecerla y no podrán hacerlo si uno de los partidos que forma la coalición gobernante, el Partido Comunista para ser exacta, propone a candidatos que tienen antecedentes por microtráfico. ¿Cuántos casos más hay como ese? ¿Qué mejor muestra de debilitamiento institucional que promover a una persona con antecedentes penales? Son las personas las que debilitan las instituciones y hacen retroceder el Estado de Derecho y mientras esas personas se mantengan en el poder no podemos esperar otra cosa que el continuo deterioro institucional.
Requerimos de un Gobierno que sincere su real intención de responder a la crisis de seguridad. Que el Presidente aclare si es el de los indultos o el que defendió a Carabineros después de la muerte de Daniel Palma, si el que entonaba la melodía sobre qué hacer en un casco militar o el que priorizaba 31 proyectos de ley para enfrentar el problema de seguridad. Aclarar eso es fundamental. Hoy pareciera que no es ni lo uno ni lo otro, aunque resulta difícil creer aquellos discursos cuando se pone del lado de la seguridad.
La oportunidad de cambiar Chile se mantiene, sólo que pareciera que no será la izquierda quien se quede con ese triunfo, ahora es turno de la oposición. Habrá que trabajar duro hoy para conquistar el podio mañana.
Excelente análisis. Y que
Excelente análisis y que grave lo expuesto. La gran pregunta es cuál Boric va a asumir de una vez por todas la función para la que fue elegido.