Señor Director,
Queda la impresión que hay algo que no podemos ver o que no nos han dicho. En la última cuenta pública frente a todo pronóstico y análisis técnico económico fue un optimista tsunami de promesas sustentadas con un aumento del gasto público y si le sumamos la visita del Presidente a la Cumbre de las Américas refiriéndose a Chile como seguro y deseable para invertir paradójicamente en medio de un proceso constitucional.
Todo lo anterior no armoniza con el otro Chile, de una inflación que carcome como nunca lo había hecho desde los años 90 a una clase trabajadora que ya venía mostrando señales de desgaste, con un país más endeudado y con proyecciones económicas recesivas. Podemos estar temporalmente tranquilos creyendo lo uno o lo otro, pero la verdad siempre buscará converger.
Francisco Lodi