El Estado de Chile tiene bajo su control a 26 empresas, siendo una parte de éstas creadas por ley, como es el caso de Codelco, y otras que son sociedades anónimas en donde la mayoría o la totalidad de la propiedad es gubernamental. De estas 26 empresas, a septiembre del presente año, 21 arrojan cifras azules, es decir, utilidades o ganancias en dicho período, mientras que las restantes cinco empresas terminaron con cifras rojas o pérdidas económicas. Dichas empresas fueron Ferrocarriles, Metro, Casa de Moneda, Metro de Valparaíso y TVN. De este grupo, hay cuatro que con cierta regularidad se encuentran en este grupo y corresponden a las de transporte, pero en esta oportunidad, tenemos a TVN como un nuevo integrante del grupo en rojo.
TVN exhibió utilidades durante el 2013, alcanzando un superávit de $4.149 millones, lo que pasó a cifras negativas, -$6.593 millones, durante el año pasado, y ahora a la alarmante sorpresa de pérdidas acumuladas entre enero y septiembre del presente año de -$17.924 millones, estimándose que el resultado final del 2015 bordeará una cifra roja de $24.000 millones, siendo dicho guarismo equivalente a cerca del 45% del patrimonio que tendrá TVN a fines de año.
Ante los negativos resultados y su alarmante empeoramiento, cabe preguntarse qué ocurrió para que cada día fuese peor que el anterior. Lo primero que se aprecia es una sustancial caída de los ingresos, los cuales son 38% inferiores a los del 2014. Esta sustancial caída de las ventas podría reflejar un ajuste en el gasto en avisaje que toda industria estaría realizando, pero vemos que en igual período las ventas de Canal 13 han subido, por lo cual si bien el desempeño económico de Chile ha sido muy modesto y eso ha afectado al gasto en publicidad, pareciera que hay factores adicionales que explican el derrumbe de los ingreso de TVN. Ahora bien, cuando caen los ingresos en esas magnitudes toda empresa busca acomodar sus costos a la nueva realidad, tal como lo está haciendo, por ejemplo, Codelco, pero al mirar el costo de producción acumulado a septiembre de este año, en TVN vemos que es sólo 1% más bajo que lo observado el año pasado, es decir, no ha habido ningún esfuerzo concreto por enfrentar esta situación. Es más, el gasto en el tercer trimestre de 2015 es superior en 10,6% al equivalente del 2014, por lo cual vemos que la situación lejos de mejorar empeora sistemáticamente. Ahora, alguien podría señalar que esos gastos crecientes constituyen el soporte de nuevos proyectos que generarán nuevos ingresos en el futuro, pero al ver el gasto de administración se observa el mismo fenómeno, es decir, se mantiene el gasto acumulado y sube en el tercer trimestre.
Al observar este contradictorio comportamiento, cabe preguntarse si el directorio aprobó esta conducta o si desconocía lo que estaba ocurriendo con las cifras. Sin duda, y a pesar de que en la actualidad está de moda que los directorios no sepan nada sobre lo que ocurre en sus compañías, creo que ya no existe excusa para que el gobierno corporativo no nos explique a todos los chilenos, accionistas de esta empresa, cuál es el plan para evitar la quiebra de TVN. Para algunos, es posible que consideren que la solución es muy fácil y que basta un aporte fiscal por el equivalente a las pérdidas acumuladas, pero creo que, en un contexto en donde no hay financiamiento suficiente para el programa de construcción de hospitales, no existe espacio para que algo así ocurra, estando todos nosotros, por tanto, esperando ver qué ocurrirá con TVN, el canal de todos los chilenos.
Tomás Flores, economista y director de Proyectos Académicos de la Universidad Mayor.
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